
Él es mi Dios y Salvador: confiaré y no temeré,
porque mi fuerza y mi poder es el Señor,
él fue mi salvación.
Y sacaréis aguas con gozo de
las fuentes de la salvación.(Salmo 12)
Padre amado, Hoy te imploro que te presentes ante mí y me brindes tu resguardo celestial, tanto de los peligros mínimos como graves, frente a entes o espíritus malignos que busquen introducirse en mi ser o el de alguien cercano, para enemigos y adversarios que buscan hacerme un mal común para verme perjudicado.
Padre, Tú que proteges a tus siervos fieles, no traicioneros, cuídame y dame tu apoyo, pues yo te he clamado como mi Rey de Reyes y Señor de Señores. Ayúdame, guíame y protégeme en cada uno de los pasos que dé el día de Hoy.
Dios Padre Todopoderoso, Tú eres mi Rey y mi Salvador, por eso el día de Hoy confiaré plenamente en ti y no temeré a ningún tipo de mal que pueda asecharme. Tú inmensa gloria y poder sobreabundarán sobre mí este nuevo día.
Amén.