Gracias Señor por permitirme ser un Ingeniero, me siento orgulloso de serlo, pero no me vanaglorio de ello; a mi profesión le debo responsabilidades y obligaciones que estoy ansioso de cumplir.
Te ofrezco Señor participar solamente en organizaciones honestas, ser leal con quien contrate mis servicios, poniendo a su disposición mis conocimientos y capacidad profesional.
Permíteme Señor que la preparación especial que poseo la sepa emplear con entusiasmo, serenidad, dedicación y generosidad; con integridad, sinceridad y honestidad en servicio de mi comunidad, de mi país y de la humanidad entera.
Por Cristo Nuestro Señor
Amén.