
Venid, aclamemos al SeƱor,
demos vĆtores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dƔndole gracias,
aclamƔndolo con cantos.(Salmo 94)
Señor, Padre amado, hoy vengo a pedirte que me escuches y que me ayudes en estos momentos de preocupación que necesito tanto de ti. Ven a mà y sé mi ayuda.
No sĆ© todos los planes que tienes para mĆ pero sĆ© que quieres mi bienestar, ensƩƱame tu camino para andar con pie firme y sin desmayar por Ć©l, que confĆe y nunca dude de tu presencia y tu poder, quita mi estrĆ©s, que no viva con ansiedad.
Hoy quiero descansar mis pensamientos y dejar toda preocupación en tus manos poderosas, ya no habrÔ nada que me quite la paz.
Gracias por que siempre escuchas mi oración y me liberas de toda angustia y aflicción.
AmƩn.