
TĆŗ que habitas al amparo del AltĆsimo,
que vives a la sombra del Omnipotente,
di al SeƱor: Ā«Refugio mĆo, alcĆ”zar mĆo,
Dios mĆo, confĆo en ti.Ā» (Salmo 90)
SeƱor, en la maƱana de este dĆa y en este nuevo amanecer vengo a pedirte que seas mi refugio y mi fortaleza, que cada uno de los pasos que dĆ© sean contigo yendo adelante para caminar seguro.
Padre amado, mi fe y mi confianza esta puesta totalmente en ti, y con tu amor en mi corazón declaro que este dĆa serĆ” bendecido y próspero. No habrĆ” nada que pueda daƱarme y paso que pueda dar en falso.
JesĆŗs mĆo, tu que eres mi refugio en todo momento te pido que no me desampares nunca.
AmƩn.